Soluciones en casa y en el Congreso. Disciplina Positiva.

¿Qué características deben cumplir las Soluciones para que no sean Consecuencias Lógicas?

Imagina un grupo de políticos reunidos…

La cuestión es que deben resolver algo en pro de la comunidad y tomar decisiones.

Entonces… ¿Por qué se enredan* en señalar culpables de haber hecho alguna cosa anteriormente?, ¿Qué consiguen centrándose la mayor parte del tiempo en tener la razón enfrascados en luchas de poder?, ¿Buscan y quieren «ganar» al otro?… y ¿Por qué se juzgan y menosprecian? Soluciones en casa y en el Congreso. Disciplina Positiva.

Es evidente que son líderes de un grupo humano (en este caso los ciudadanos) y que son responsables de procuran su bienestar (igual que unos padres en una familia, un maestro en un aula, el director en el colegio o un jefe en su empresa). Soluciones en casa y en el Congreso. Disciplina Positiva.

Una de las más valiosas habilidades que debe tener un líder es: Saber enfocarse en soluciones.

Por supuesto que esas soluciones deben cumplir unas características para que cumplan su función de RESOLVER en positivo.

La Disciplina Positiva nos facilita el trabajo y nos da el marco a medida de la foto:

 “Las 3 Erres y una U para enfocarse en soluciones”.

Si la propuesta de un líder cumple con los siguientes 4 criterios entonces tiene garantizado que la decisión no será una “Consecuencia Lógica” sino una Solución:

 La Solución debe ser… Soluciones en casa y en el Congreso. Disciplina Positiva.

  1. Relacionada con lo sucedido.
  2. Respetuosa porque no añade culpa, vergüenza ni humillación.
  3. Racional y justa para todas las partes implicadas.
  4. Útil para poner en práctica y evitar que se cometa el mismo error.

La diferencia entre decidir una solución y decidir una consecuencia lógica es de peso. La Consecuencia Lógica busca “hacer pagar” por un error que ya pertenece al pasado y tiene visos de castigo. La Solución se centra en ayudar a las personas a  mejorar en el futuro y, evidentemente, a resolver el problema o circunstancia que se haya planteado.

Aquí la reunión política pasaría  de encontrar soluciones “humillantes” a encontrar soluciones “útiles”. Volvemos al concepto de que no hace falta lastimar al otro para que aprenda y mejore, no necesitamos “ganar” al otro en una lucha de poderes, necesitamos “ganarnos” al otro para estar unidos hacia las resoluciones.

Imagina ahora de nuevo la reunión de políticos. Centrados en buscar soluciones racionales y justas, relacionadas directamente con el asunto que tratan de resolver, respetuosas y, sobre todo, útiles.  La imagen es extraña porque no estamos acostumbrados ¿verdad?, pensemos ahora en los beneficios para la población que acarrearía que actuasen así ¿te imaginas a nuestros gobernantes dando un ejemplo digno de cómo enfocarse en soluciones, de cómo aceptar los errores y aprender de ellos, de unión y fuerza en pro del bienestar social?

¿Te imaginas esto mismo a menor escala en cada empresa, cada colegio y cada hogar?

Suena utópico para muchos pero para otros tantos como yo esto YA es posible y en el hogar podemos empezar a practicarlo desde el mínimo pero más básico nivel: la familia.

Los niños son excelentes buscando soluciones.

Sólo necesitan que les escuchen, les den la oportunidad  y les dejen entrenar en ello, por supuesto, porque nadie nace aprendido, y así serán un “líder-tesoro” en la comunidad o grupo social en el que se muevan.

Es duro ver ahora cómo somos los adultos quienes lo impedimos por tradicionalismos y falta de sentido crítico ante el hacer popular. Fijándonos en los niños educados de forma “tradicional”  veremos que aprenden a  hacer las cosas cómo y cuándo se les dice que se deben hacer. Los educados con disciplina positiva, de forma respetuosa, firme y amable al mismo tiempo, aprenden a ser miembros activos de la sociedad porque son invitados a analizar la situación y a colaborar buscando soluciones desde el respeto, entonces sienten la pertenencia y la capacidad de contribuir.

Entonces, quizá, la solución con la que podemos iniciarnos sería: “A partir de este momento voy a enfocarme en soluciones cuando se presente una situación a resolver, y no en buscar culpables, señalar y hacer pagar por los errores”.

Virginia García

*Contigo Desenredo

Educación Respetuosa bajo los principios de la Disciplina Positiva